El papa Francisco recibió a un grupo de chilenos que fueron víctimas de abuso sexual por parte de sacerdotes, para pedirles "perdón" y "compartir su dolor", informó el Vaticano.

La mañana de este miércoles, desde el Vaticano, los tres principales denunciantes de Fernando Karadima, Juan Carlos Cruz, James Hamilton y José Andrés Murillo, dieron una conferencia de prensa en la hicieron un balance tras la reuniones que sostuvieron con el papa Francisco.

Fuente: https://youtu.be/jfU13vtqHeI

Tras compartir durante casi una semana con Francisco en la residencia Santa Marta, en la instancia Hamilton leyó un comunicado en el que declaró que "luego de 10 años siendo tratados como enemigos porque luchamos en contra del abuso sexual y el encubrimiento en la Iglesia, estos días conocimos un rostro amigable de la Iglesia, totalmente diferente al que conocimos antes".

Reveló, además, que "el papa nos pidió formalmente perdón a nombre propio y a nombre de la Iglesia universal" y agregó que "esperamos que el papa transforme palabras de perdón en acciones ejemplares, de no ser así esta reunión será letra muerta".

Cruz, Hamilton y Murillo señalaron en el texto que hablaron con Francisco desde la experiencia, "una a las que otros no han logrado sobrevivir".

"Abordamos temas como el abuso sexual, el abuso de poder y sobre todo el encubrimiento de los obispos chilenos. Realidades a las que no nos referimos como pecados, sino como crímenes y corrupción y que no se agotan en Chile, sino que son una epidemia que ha destruido miles de vidas de niños, niñas y jóvenes", agregaron.

En ese sentido, sostuvieron que "la Iglesia tiene el deber de ser un refugio para las víctimas, cosa que hoy no ocurre".

"El papa se mostró muy receptivo, atento y empático durante las intensas y largas horas de conversación. Esto fue muy significativo y de ahí nació la idea de generar sugerencias, que nos comprometimos a enviarle durante los próximos días y seguir trabajando en el tema", aseguraron.

Finalmente, indicaron que aceptaron la invitación al Vaticano en "representación de las miles de personas que han sido víctimas de abuso sexual y encubrimiento de la Iglesia Católica, ellos le han dado sentido a nuestra vida".

Fuente: Ahora Noticias

Otro tema planteado por los denunciantes en Roma surgió de las palabras de James Hamilton en el dialogo posterior en la conferencia de prensa.

“Le pido aquí, públicamente, al Presidente de mi país, dijo Hamilton, que tome la decisión más sabia y a favor de las víctimas, que hoy en día lo necesitan para la paz social y en su corazón, la ley de imprescriptibilidad para abusos sexuales de menores y adolescentes”.

Hamilton sostuvo que “nos encantaría, por de pronto, contra el cardenal (Francisco Javier) Errázuriz, que lo consideramos como un encubridor de abuso y hoy en día se nos confirma aún más su acción criminal, lo mismo para el cardenal (Ricardo) Ezzati”.

“Nos encantaría poder meterlos a todos en la cárcel, pero en Chile los abusos prescriben, desde el punto de vista penal, a los 5 y 10 años” lamentó.

Aunque respondiendo directamente a otro crimen en Chile, el presidente Sebastián Piñera sorprendió, dos días después de las palabras de Hamilton, al enviar al Congreso una indicación que establece la imprescriptibilidad total de los delitos sexuales contra menores, a fin de modificar así el actual proyecto de ley en trámite. Este podría llegar a ser un nuevo aporte derivado de la perseverante lucha que vienen dando las víctimas del acusado Fernando Karadima y que ya ha provocado este auspiciador terremoto en la iglesia chilena.

Fuente: Vida Nueva Digital

La situación entre el papa Francisco y las víctimas de Karadima se gestó en enero de este año cuando el papa realizó una visita de tres días a Chile, instancia en donde defendió enérgicamente al obispo chileno Juan Barros, quien es acusado por las víctimas de ser un encubridor de los delitos del ex-sacerdote.

Fuente: https://youtu.be/VXb7LYLp3pI

Durante su gira por Chile el papa invitó a Barros a sus actividades públicas más importantes y afirmó a los medios locales que las acusaciones en contra del obispo eran "calumnias".

Fernando Karadima es un ex-sacerdote que en 2011 fue condenado por el Vaticano a "una vida de oración y penitencia", bajo los cargos de abusos sexuales y psicológicos a menores.

La justicia chilena no pudo castigarlo debido a que sus delitos estaban prescritos.

Fuente: Sputnik News

Fuente: CNN Chile