Con Donald Trump como presidente estadounidense, Washington, Moscú y la Santa Sede tienen mucho más en común que antes, asegura el rotativo italiano 'Il Foglio'.

"Rusia es un terreno de encuentro entre Donald Trump y el papa Francisco", se titula un artículo publicado por el periódico italiano 'Il Foglio' que analiza los cambios que podrían ocurrir en la estructura global del poder y que prevé incluso una alianza entre tres poderes: Rusia, EE.UU. y Vaticano.

Fuente: Il Foglio

"Trump es un maná para el Vaticano"

"La nueva configuración geopolítica, con Trump en la Casa Blanca, va bien para todos", destaca Stefan Caprio, profesor de cultura rusa en el Pontificio Instituto Oriental en Roma, entrevistado por el diario. "Interesa a todos que la situación en Oriente Medio se estabilice", asegura, agregando que la "Iglesia católica siempre ha tenido interés en que Rusia controle Oriente Medio, sobre todo por razones espirituales".

"Tengo la impresión de que Trump es un maná para el Vaticano", cree Caprio. "Su política exterior, como la presenta, tiene muchos puntos de contacto con la de la Santa Sede; mucho más de lo que se podría esperar de la presidencia de Clinton, y no solo en el plano ético", añade.

¿Nueva alianza?

Matteo Matzuzzi, autor del artículo, recuerda que en 2013 el papa Francisco se dirigió al Kremlin con la intención de impedir una operación militar de los países occidentales contra Damasco. El Vaticano y Rusia siguen "la misma línea sobre Oriente Medio", apunta el periodista, precisando que esta línea consiste en "la protección de la comunidad cristiana, la gran desconfianza hacia los llamados rebeldes moderados y el apoyo (más matizado por parte de la Santa Sede) a Bashar al Assad".

De ese modo, según Matzuzzi, cada vez se ve más claramente un triángulo entre el Vaticano, Washington y Moscú. Washington estaría dispuesto a cooperar con el Kremlin, y la Santa Sede ofrece a Rusia un diálogo sobre problemas éticos y espirituales, subraya el periódico recordando el histórico encuentro entre el papa Francisco y el patriarca ruso Kiril el año pasado en Cuba.

En los últimos años Moscú y el Vaticano han participado en un juego geopolítico en el que ambos consideran si pueden convertirse en "aliados situacionales", según un artículo publicado en el portal ruso 'Vzgliad'. "En la construcción de las relaciones entre Donald Trump y Vladímir Putin el papel del Vaticano podría ser muy importante e interesante. Y el triángulo entre Rusia, EE.UU. y el Vaticano podría pronunciarse no solo en cuestiones de Oriente Medio, sino también en asuntos europeos", aclara Piotr Akopov, columnista del portal.

Fuente: RT